jueves, 18 de junio de 2015

8.- Un libro escrito por alguien menor de 30 años: El abismo de los justos – Abel Ochoa Suárez

El abismo de los justos es un libro de Abel Ochoa Suárez.
Escritor de Guayaquil, Ecuador. 1986. Es diseñador, publicista y poeta. Ha publicado El abismo de los justos, Quito/2012.
Sinopsis:
La poesía llega rodeada de una atmósfera entre parnasiana y maldita. Su discurso citadino retrata sicológicamente a los otros “yo” que poseemos todos.
El pequeño libro consta de 78 páginas, un poemario de 40 poemas y un prólogo interesante. No soy amante de la poesía, pero he leído el libro dos veces una por recomendación y otra por placer a la lectura. La poesía de Ochoa tiene un patrón lírico, ha hecho que lo relea completo y lo deguste con paciencia y misterio. Alejado de lo social y político, los poemas tienen profundidad de sentimiento que te hace detener en cada imagen.
Uno de mis poemas favoritos es sin duda “Declaración” (…) ¿De qué manera puedo arrancarme el alma y dártela en una caja de zapatos? (Pág. 72)
La poesía es sin duda un reflejo de lo que sentimos, tan realista y surrealista a la vez.
“Muero gota a gota”: Muero gota a gota desde que no muero contigo (…) extinguiéndome de a poco desde que tu presencia no me quema todo. (Pág. 57)
Humano, canaliza el amor, la vida y la muerte. 
“Poema en las alturas”: 
Estamos encadenados por las mismas nubes
y abajo sonríe el abismo.
¡Caigamos juntos! o si prefieres, nos podemos quedar acá
Contigo el cielo me sabe a cielo. (Pág. 28)
La poesía es un canal de salida a todo lo que cae sobre nosotros. Así como hay un ambiente romántico, también te lleva a imágenes oscuras con rimas sombrías y llenas de dolor.
“Cenizas”:
Arden las paredes, nuestras hieles se caldean,
todo es fuego, nos consumimos, 
te ofrezco mis cenizas. (Pág 59)
“Llévame”:
La noche atesora su lastre y mis párpados sedientos de tu hiel,
vengan por esta necrópolis (…)  llévame a tu cielo, ¡mataré a todos los dioses! no me dejes vivir.
“Ne me quitte pas (No me dejes)”  Una avalancha de sensaciones.
¿Cómo dormir si estás en cualquier sueño?,
¿cómo beber si ya jamás me sacio?
Tú eras mi fuente, tú eras mi palacio…
¿Cómo ver con los ojos del desdeño?
¿Cómo vivir sin ánima? Quizás
otros maldigan este amor bendito
y yo sólo te digo con un grito
de mis entrañas: ¡ne me quitte pas!
El Abismo de los justos, refleja una fe propia e íntima, en cada poema puedes sentirse solo o puedes sentirte cotidiano.
Cabe decir que el prólogo manejado por Jorge Valbuena es directo y encierra todo lo que puedes entender del poemario.  “El misterio-tiempo-origen-destino y hallazgo ha acompañado siempre al poema”
Presentimientos del pasado se hacen vigente; la fe, la vida, los dioses vuelven a su cauce de contracorriente en el rito de ir hacia el origen. 
Lectura recomendada.
En lo personal me quedo con:
Declaración.
Poema en las alturas.
El mendigo y el niño.
En este atardecer bailamos.
Pd. Léanlo junto con un diccionario.

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